Hoy quiero hablaros sobre un tema fascinante y esencial en el aprendizaje del inglés: la relación entre cultura e idioma. A medida que vuestros hijos se embarcan en su viaje hacia la fluidez en inglés, es crucial que comprendan cómo la cultura influye en el idioma y viceversa. Cuando pensamos en aprender un nuevo idioma, a menudo nos centramos en la gramática, el vocabulario y la pronunciación. Sin embargo, el idioma es mucho más que una simple colección de palabras y reglas, puesto que es un reflejo de la cultura de quienes lo hablan. Cada idioma está impregnado de matices culturales, tradiciones y valores que dan forma a la manera en la que nos comunicamos. Por lo tanto, entender la cultura detrás del idioma enriquece enormemente la experiencia de aprendizaje, ya que nos prepara para futuras interacciones con personas de diferentes orígenes en un contexto real. Debemos tener en cuenta que el repertorio de culturas con las que se toparán estos jóvenes es inmenso. Las culturas de los angloparlantes son increíblemente diversas (pensemos en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, países de África, colonias como la India…). Hay infinidad de países anglófonos y, además, es muy probable que quienes estudian inglés lo utilicen con no nativos, por lo tanto estarán expuestos a las culturas de cualquier rincón del mundo cuando lo pongan en práctica. Como es lógico, no pretendemos que sean expertos en cada una de las culturas relacionadas con el inglés, pero sí preparar a nuestro alumnado para el día en el que puedan vivir un choque cultural. Un choque cultural puede definirse como una reacción de nerviosismo, confusión o tensión que experimentan las personas cuando se exponen a otras culturas. A través de nuestras clases y talleres intentamos acercarles costumbres y formas de relacionarse diferentes a las que conocen para que abran su mente y puedan gestionar situaciones que no hayan vivido antes cuando se presente la necesidad. Aunque no siempre sepan qué esperar, al menos inculcarles una actitud tolerante y positiva para aceptar algo nuevo y ser capaz de integrarse. Ejemplos de diferencias en socialización pueden ser las formas de cortesía, los gestos, el espacio personal… En algunas culturas es común ser directo e ir al grano, mientras que en otras se valora más la diplomacia y la sutileza. Hablarles sobre estas diferencias les ayudará a comunicarse de manera más efectiva y a evitar malentendidos. Transmitiéndoles este conocimiento pragmático evitaremos que se sientan ofendidos ante un saludo más frío o distinto a los dos besos o apretón de manos al que estamos acostumbrados o que no les resulte desagradable descalzarse al entrar a una casa o recinto público que lo requiera. En casa podéis colaborar en el descubrimiento de rasgos que son propios de otras culturas a través del cine, la lectura, la música y la celebración de festividades típicas. Esto, a la larga, mejora la comprensión del idioma y proporciona una perspectiva más amplia sobre cómo otros hablantes piensan, se expresan y conviven.
En definitiva, desde English Naturally nos preocupamos por incorporar actividades pragmáticas y culturales que propicien la adquisición de las habilidades necesarias para el desempeño social en otras lenguas y contextos. Detrás de una fiesta de Halloween o Navidad hay una intención de capacitar a los estudiantes a desenvolverse en situaciones futuras, se trata de una diversión con objetivos claros. Con cariño, Ari
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AuthorDaniel Peel. Archives
Junio 2024
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Todo
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