Project Fluency
¡UN PLAN PARA TODOS!
Precios de membresía
30 días garantía de devolución del dinero.Somos conscientes de lo difícil que puede resultar compaginar todas las actividades y horarios de nuestros hijos. También somos conscientes de lo estresante que puede ser comenzar una nueva actividad para el alumnado ya que, a veces, las cosas simplemente no funcionan como esperábamos.
Por eso hemos creado una garantía de devolución del dinero de 30 días. De esta manera puedes inscribir a tu(s) hijo/a(s) en English Naturally sabiendo que si por alguna razón no encontramos un horario adecuado te devolveremos el dinero, o si durante los primeros 30 días decides que no es lo que esperabas, háznoslo saber y te devolveremos el dinero, tanto la inscripción como el primer mes de membresía. |
"Mi hijo empezó este año (4 años) y la verdad es que estamos encantados, el va súper contento y las cosas que aprende las dice en casa con naturalidad, que es de lo que se trata. Verlo así de feliz nos da mucha tranquilidad como padres. Además de sus clases, le encanta ir a la clase privada con su profe y también a la gran cantidad de talleres que ofrecen mensualmente. Totalmente recomendable 100%👌👌"
Carol |
"Tras varios anos de clases a miña filla está encantada co método, co profesorado. E motivada para seguir profundizando no idioma. Eu polo tanto moi contenta tamén 😀"
Monika |
Lee más sobre los componentes principales del programa
Clases grupales
Clases en grupos reducidos que siguen un plan de estudios diseñado a medida. En ellas se presentan a los estudiantes todos los elementos y estructuras del lingüísticas necesarias.
No hay libros de texto, ni listas de vocabulario ni estructuras gramaticales aburridas, sino un programa creado especialmente para cada estudiante y cada grupo. Esto es inglés en contexto. Conversaciones de la vida real, desarrolladas a propósito de una manera que permite a los estudiantes centrarse en la conversación y en los acontecimientos que tienen lugar, sin preocuparse por el idioma o las palabras que estén usando, sin miedo a cometer errores. En definitiva, un trampolín para lograr una mayor precisión en el idioma. Pero, sobre todo, estas clases siguen un mismo patrón, que consiste en que lo aprendido será aplicable a la vida real del alumnado. Eventos familiares
Nuestros eventos familiares son realmente para vosotros, las familias.
Una vez al mes invitaremos a nuestros miembros a un evento organizado para las familias, que estará diseñado para que toda la familia participe en el proceso de aprendizaje del idioma. Sabemos muy bien que cuando las cosas se hacen en familia se cimientan en el corazón y la mente de nuestros hijos. Además, sabemos que si lo que hacemos con ellos es en inglés, sabrán que el inglés se puede usar en cualquier lugar y con cualquier persona, incluidos vosotros, sus padres. Porque, al fin y al cabo, es a vosotros a quienes admiran por encima de todo. Nuestros eventos familiares tendrán lugar en el centro de idiomas y en nuestra área local. Queremos que tú y tus hijos sintáis el idioma, no solo como una mera asignatura o habilidad, sino también como un estilo de vida. Dependeremos de tu participación en nuestros eventos familiares para asegurarnos de que todos obtengamos el máximo beneficio de ellos. Por supuesto, estos no son obligatorios. Disponéis de total libertad de decidir si asistir a alguno, a ninguno, o a todos, según lo consideréis oportuno. Asimismo, estos eventos serán una oportunidad maravillosa para conocer a otros estudiantes y a sus padres, lo que fortalecerá aún más nuestra maravillosa familia y comunidad. Biblioteca
Todos nuestros miembros tienen acceso a nuestra biblioteca, que cuenta con una gran variedad de libros, películas y juegos que pueden llevarse a casa para disfrutar en su propio tiempo y espacio si lo desean.
Sabemos que para que la próxima generación domine el inglés debe experimentarlo y disfrutarlo en todos los aspectos de la vida. Y lo que es más importante todavía, en sus pasiones y pasatiempos. Nuestros estudiantes podrán ver y escuchar las historias que se les cuenten, integrando y fortaleciendo sus habilidades auditivas de una manera cautivadora y agradable. También podrán llevarse libros a casa para leer y explorar por sí mismos, participando y mejorando sus habilidades de lectura al recurrir a su amor por los libros. Asimismo, hay disponible una pequeña selección de juegos para llevarse a casa, para compartir y jugar con familiares y amigos, introduciendo el idioma más en la vida de nuestros estudiantes a modo de pasatiempo, de una manera sensorial e interactiva. De esta forma, las cuatro habilidades básicas de leer, escuchar, hablar y escribir, se están introduciendo y disfrutando en casa, en la sala de estar o en el dormitorio, con familiares y amigos... Por consiguiente, el inglés se percibe como un medio de comunicación que no solo es aceptable y normal, sino que también tiene un propósito y disfrute. |
Clases individuales
Con la posibilidad de reunirse con su maestro individualmente, nuestros estudiantes y maestros pueden construir relaciones fuertes y seguras, lo que conlleva a un aumento de la confianza y fluidez del alumnado. Esta sesión también es ideal para apoyar al estudiante en áreas con dificultades, jugar a su juego favorito, leer un libro de su interés o simplemente conversar en persona en un ambiente seguro y privado.
Los padres también pueden unirse a sus hijos durante este tiempo, hacer preguntas, observar el progreso de sus hijos a nivel personal y, quizás lo más útil e importante de todo, unirse al proceso de aprendizaje comunicándose con su hijo y con el maestro en inglés. De esta manera se consigue consolidar el desarrollo de su competencia comunicativa. Amigos por correspondencia
El programa de amigos por correspondencia de English Naturally tiene como objetivo potenciar las habilidades de escritura del alumnado. La participación en este programa consiste en el intercambio de cartas virtuales con otros estudiantes de inglés para practicar la lengua escrita. Además, esta actividad aportará beneficios a nivel personal y social, como la interacción a largo plazo, el descubrimiento de otras culturas, el contacto que puede llegar a convertirse en una bonita amistad, la mejora de las habilidades comunicativas en inglés y la ilusión de escribir para ser leído. Este programa pretende incentivar la escritura haciendo que esta tome un verdadero sentido para los estudiantes. Escribir para que nos corrijan está bien, pero es mucho más motivador y tiene mucha más lógica escribir con una intención, para alguien y por algo en concreto.
De esta manera el alumnado creará, con la ayuda de su profesora, un perfil en el que describan sus aficiones, gustos e intereses mediante el cual se presentarán a otros estudiantes registrados en la página web Students of the World https://studentsoftheworld.info/, que lleva más de 25 años funcionando como intermediario entre personas que desean practicar un idioma de forma amena. Todas las comunicaciones se realizan a través de la página web y son revisadas constantemente (lenguaje inapropiado, protección de datos, contenido respetuoso) por la asociación que gestiona el sitio web. El alumnado podrá encontrar amigos por correspondencia de edades e intereses afines con los que podrán entablar conversaciones enriquecedoras durante la continuidad de su membresía. Para acceder a su bandeja de entrada deberán introducir un número de referencia y una contraseña asociada a su perfil, datos que serán custodiados por su profesora para poder supervisar y asegurar el uso correcto de cada cuenta de acuerdo con los fines educativos establecidos. Manualidades
Talleres diseñados por y para los estudiantes, partiendo de sus intereses personales, pasatiempos y pasiones para generar un interés genuino y energía positiva en el proceso de aprendizaje.
Es un hecho que cuando los niños se divierten y participan en una actividad el proceso de aprendizaje es subconsciente y también memorable. De esta manera, el lenguaje se introduce a los estudiantes en sus propios términos, a su propio nivel y de una manera que recordarán. El tema, el vocabulario y las conversaciones proporcionadas serán todos los que el estudiante quiera y pueda usar una y otra vez. Haciéndolo real, aplicable y duradero. Los estudiantes trabajarán y aprenderán en edades y niveles de idiomas mixtos, emulando la vida real a nivel internacional. Trabajamos con dedicación para presentar nuevos temas y materias con el fin de ofrecer al alumnado una amplia y variada gama de intereses y vocabulario en un entorno más dinámico y atractivo. |
"¿Para qué edades se imparten clases?"
En English Naturally nos dedicamos exclusivamente a la enseñanza de inglés a estudiantes de entre 3 y 18 años. "¿Cuándo puede(n) empezar mi(s) hijo/a(s)?" La inscripción en English Naturally está abierta todo el año, por lo que su(s) hijo/a(s) puede(n) empezar con nosotros en cuanto se acuerde un horario de clases. "¿Podemos tener solo las clases en grupo?" No. Nuestro programa se ha elaborado cuidadosamente para garantizar que nuestros socios reciban lo mejor de su viaje de aprendizaje con nosotros. Todas las partes del programa son importantes y, como tal, van juntas y no podrán dividirse. |
"¿Tendré que confirmar el horario de fútbol / balonmano / música... etc. antes de poder inscribir a mi hijo/a?"
En English Naturally ofrecemos una garantía de devolución del dinero en 30 días. De esta manera puedes inscribir a tu(s) hijo/a(s) para asegurar su plaza, sabiendo que, si por cualquier motivo, no encontramos un horario de clases adecuado, te devolveremos tanto la inscripción como el mes abonado en su totalidad. "¿Ayudáis al alumnado con sus deberes de inglés?" Aunque nuestra metodología y plan de estudios no siguen el sistema de la escuela pública, nuestras clases privadas son el lugar perfecto para apoyar a cada estudiante individualmente con sus necesidades en el idioma, incluyendo deberes, exámenes... ¡lo que necesite! |
Si tienes alguna duda, puedes Contactarnos para hablar con nosotros sobre nuestro curso y las necesidades de tu hijo.
¿CUÁL ES EL PROBLEMA REAL?
No es necesario leer ninguna estadística o estudio lingüístico para corroborar que los españoles seguimos, tras haber estudiado inglés durante una media de 12 años en el colegio e instituto, sin saber hablar inglés.
Sigue siendo una gran ironía que, tras tantos años de estudio de un idioma, contestemos a la pregunta ¿sabes hablar inglés? Con un “bueno… un poco”, o con la excusa del… “es que yo estudié francés”. Incluso al alumnado con mejores notas en inglés les tiemblan las piernas cuando se topan con un angloparlante que les pregunta “how are you doing mate?”, porque lo que más dieron en clase fue la estructura gramatical del pasado perfecto en pasiva. Si encima el ‘guiri’ es de Escocia y pronuncia muy poco parecido a los audios del libro, el susto es aún mayor. ¿Cuál es el problema real?
Básicamente seguimos sin enseñar, ni evaluar la parte más importante de una lengua: la comunicación, es decir, el uso de la lengua en sí, ¡metafórica y literalmente hablando!
Llevo 22 años impartiendo clases de inglés y siempre entro en el aula el primer día de curso diciendo “how are you guys?, let's have some fun!”. Insisto en que lean, escuchen y hablen, sobre todo que hablen, en inglés, aun cometiendo todos los errores que haga falta siempre y cuando busquen la finalidad comunicativa. La gran satisfacción de llegar a dominar un idioma no es saber conjugar el verbo To Be, les digo, es hablar, entender lo que te dicen y contestar; hacerse entender, en definitiva, comunicarse. Muchos se preguntarán ¿y te funciona?
La respuesta depende mucho del curso. Aún son muchos los docentes que piensan que, cuanto más bajo es el curso, menos van a entender el inglés hablado, pero en realidad es todo lo contrario. Cuanto menor es el alumno, mayor es la capacidad de comprender y asimilar una lengua, nunca por medio de la gramática, sino por el juego en el idioma que se quiere aprender, por lo tanto funciona más el hablarle en inglés y hacer juegos comunicativos que intentar que comprenda conceptos gramaticales. Es parejo al aprendizaje de la lengua materna, los bebés asimilan el idioma sin comprender las estructuras y tampoco aprenden con traducciones.
Los alumnos que entienden y me siguen se ilusionan con la asignatura, los que no entienden tanto al menos se divierten con los juegos y aprenden frases hechas en contextos reales, aunque luego reciban apoyo extra con una breve explicación o traducción si es necesario.
En los cursos más altos, el nivel de exigencia aumenta de cara a pruebas de acceso a la universidad, donde muy contradictoriamente con la idea curricular original de evaluar al alumnado por el conocimiento de un inglés funcional y comunicativo, el examen aborda principalmente contenidos gramaticales con transformaciones de frases y fonética de palabras que un nativo usaría 3 veces en toda su vida.
Es decir, las leyes educativas buscan el cambio siendo conscientes de que hay algo que no funciona y tratan de hacer la asignatura más práctica. Pero no sirve de mucho incluir estándares de aprendizaje y competencias comunicativas sin dar instrumentos para ejecutarlos, para aplicarlos en el aula y, sobre todo, para evaluarlos.
Mientras el sistema educativo no establezca un criterio coherente en la importancia del aprendizaje comunicativo de una lengua, donde se enseñe y se evalúe al alumno en las importantes pero nunca llevadas a la práctica competencias comunicativas, el alumno nunca tendrá una motivación real, ya que, a medida que pasa de nivel, el uso del inglés pierde importancia ante una nota numérica para acceder a estudios superiores.
Casi me arriesgaría a asegurar que los españoles empezaríamos a hablar más inglés si hubiese un examen que nos exigiese hablarlo. Es lógico, por lo tanto, que un alumno pierda interés en hablar y que le hablen en inglés si lo que le interesa es aprobar o sacar buena nota y esa nota no va a estar basada en lo bien que pueda desenvolverse en una conversación. Es decir, en los exámenes siguen primando los contenidos gramaticales, con lo cual, por mucho que intento luchar con los “no te entiendo profe!”, “en Spanish please!” y “pero esto cae en el examen?”; al final, casi siempre termino aplacando mi ilusión por hacer clases más comunicativas y mis “in English, please!” para incluirme en el gremio de los docentes que no dan sus clases de inglés en inglés.
Por ello, a pesar de los constantes cambios en el currículo, la mayoría de los profesores de inglés aún entran en clase diciendo: “vamos a repasar el verbo To Be” o “hay que saberse los pronombres objeto”...
¿Puede haber algo menos interesante para un alumno de 1º de la ESO? Lo puedo aplicar con un ejemplo más práctico; sería como si en una clase de educación física el profesor explicase a sus alumnos la teoría de cómo se bota un balón de baloncesto sin emplear ninguna pelota o hacer que los propios alumnos botasen el balón. Es decir, darles teoría sin práctica o juego. Con los idiomas ocurre lo mismo:
la teoría sin la práctica no sirve de nada.
No puedo finalizar sin comentar otra ironía: Educación nos brinda el privilegio de traer a nuestras aulas auxiliares de conversación en muchos de nuestros centros de enseñanza, pero sin darnos pautas sobre cómo incorporarlos al aula y por ende, sin darle valor comunicativo a la asignatura.
A mi entender un auxiliar, aunque no sea docente, es un apoyo al profesor, un miniviaje a la cultura e idioma real que impartimos y creo que, bien aprovechados, podrían hacer maravillas en un aula. Sin embargo, no todos los profesores ven su utilidad y me consta que, desafortunadamente, en muchos de estos centros terminan relegados a un rincón de la clase como parte del mobiliario escolar.
En conclusión, la respuesta a la gran pregunta de por qué no sabemos hablar inglés es principalmente porque el inglés se enseña con una finalidad errónea. Y a pesar de que muchos profesores nos empeñemos en cambiar las formas, no es fácil luchar ante un currículum con leyes contradictorias, que impone reglas sin posibilidad de llevarlas a las aulas y que no evalúa la competencia comunicativa que plantea en su currículo con una prueba específica para la que el alumno se pueda preparar y pueda llevar después a la práctica, en la vida real.
Así mismo, si a esta situación de teoría inejecutable le añadimos la práctica real en clases con ratios inmensas y llenas de necesidades específicas, la enseñanza, y aquí ya no solo de un idioma, se complica aún más.
En cualquier caso, por mi parte, con la esperanza de un futuro cambio, seguiré abogando por una enseñanza del inglés comunicativa, intentado que mi alumnado no pase por 12 años de aprendizaje de un idioma sin haberlo usado y seguiré entrando en clase el primer día de curso diciendo: “hi guys!, let's have some fun!”.
Quién sabe, tal vez algún día alguno de estos estudiantes se encuentre con un extranjero que le pregunte “how are you doing, mate?” y le sepa contestar… Y yo, como docente, habré cumplido mi objetivo, aunque no sea curricular, de haberle enseñado a comunicarse en inglés.
Escrito por: Irene Alonso.
Docente y escritora
Sigue siendo una gran ironía que, tras tantos años de estudio de un idioma, contestemos a la pregunta ¿sabes hablar inglés? Con un “bueno… un poco”, o con la excusa del… “es que yo estudié francés”. Incluso al alumnado con mejores notas en inglés les tiemblan las piernas cuando se topan con un angloparlante que les pregunta “how are you doing mate?”, porque lo que más dieron en clase fue la estructura gramatical del pasado perfecto en pasiva. Si encima el ‘guiri’ es de Escocia y pronuncia muy poco parecido a los audios del libro, el susto es aún mayor. ¿Cuál es el problema real?
Básicamente seguimos sin enseñar, ni evaluar la parte más importante de una lengua: la comunicación, es decir, el uso de la lengua en sí, ¡metafórica y literalmente hablando!
Llevo 22 años impartiendo clases de inglés y siempre entro en el aula el primer día de curso diciendo “how are you guys?, let's have some fun!”. Insisto en que lean, escuchen y hablen, sobre todo que hablen, en inglés, aun cometiendo todos los errores que haga falta siempre y cuando busquen la finalidad comunicativa. La gran satisfacción de llegar a dominar un idioma no es saber conjugar el verbo To Be, les digo, es hablar, entender lo que te dicen y contestar; hacerse entender, en definitiva, comunicarse. Muchos se preguntarán ¿y te funciona?
La respuesta depende mucho del curso. Aún son muchos los docentes que piensan que, cuanto más bajo es el curso, menos van a entender el inglés hablado, pero en realidad es todo lo contrario. Cuanto menor es el alumno, mayor es la capacidad de comprender y asimilar una lengua, nunca por medio de la gramática, sino por el juego en el idioma que se quiere aprender, por lo tanto funciona más el hablarle en inglés y hacer juegos comunicativos que intentar que comprenda conceptos gramaticales. Es parejo al aprendizaje de la lengua materna, los bebés asimilan el idioma sin comprender las estructuras y tampoco aprenden con traducciones.
Los alumnos que entienden y me siguen se ilusionan con la asignatura, los que no entienden tanto al menos se divierten con los juegos y aprenden frases hechas en contextos reales, aunque luego reciban apoyo extra con una breve explicación o traducción si es necesario.
En los cursos más altos, el nivel de exigencia aumenta de cara a pruebas de acceso a la universidad, donde muy contradictoriamente con la idea curricular original de evaluar al alumnado por el conocimiento de un inglés funcional y comunicativo, el examen aborda principalmente contenidos gramaticales con transformaciones de frases y fonética de palabras que un nativo usaría 3 veces en toda su vida.
Es decir, las leyes educativas buscan el cambio siendo conscientes de que hay algo que no funciona y tratan de hacer la asignatura más práctica. Pero no sirve de mucho incluir estándares de aprendizaje y competencias comunicativas sin dar instrumentos para ejecutarlos, para aplicarlos en el aula y, sobre todo, para evaluarlos.
Mientras el sistema educativo no establezca un criterio coherente en la importancia del aprendizaje comunicativo de una lengua, donde se enseñe y se evalúe al alumno en las importantes pero nunca llevadas a la práctica competencias comunicativas, el alumno nunca tendrá una motivación real, ya que, a medida que pasa de nivel, el uso del inglés pierde importancia ante una nota numérica para acceder a estudios superiores.
Casi me arriesgaría a asegurar que los españoles empezaríamos a hablar más inglés si hubiese un examen que nos exigiese hablarlo. Es lógico, por lo tanto, que un alumno pierda interés en hablar y que le hablen en inglés si lo que le interesa es aprobar o sacar buena nota y esa nota no va a estar basada en lo bien que pueda desenvolverse en una conversación. Es decir, en los exámenes siguen primando los contenidos gramaticales, con lo cual, por mucho que intento luchar con los “no te entiendo profe!”, “en Spanish please!” y “pero esto cae en el examen?”; al final, casi siempre termino aplacando mi ilusión por hacer clases más comunicativas y mis “in English, please!” para incluirme en el gremio de los docentes que no dan sus clases de inglés en inglés.
Por ello, a pesar de los constantes cambios en el currículo, la mayoría de los profesores de inglés aún entran en clase diciendo: “vamos a repasar el verbo To Be” o “hay que saberse los pronombres objeto”...
¿Puede haber algo menos interesante para un alumno de 1º de la ESO? Lo puedo aplicar con un ejemplo más práctico; sería como si en una clase de educación física el profesor explicase a sus alumnos la teoría de cómo se bota un balón de baloncesto sin emplear ninguna pelota o hacer que los propios alumnos botasen el balón. Es decir, darles teoría sin práctica o juego. Con los idiomas ocurre lo mismo:
la teoría sin la práctica no sirve de nada.
No puedo finalizar sin comentar otra ironía: Educación nos brinda el privilegio de traer a nuestras aulas auxiliares de conversación en muchos de nuestros centros de enseñanza, pero sin darnos pautas sobre cómo incorporarlos al aula y por ende, sin darle valor comunicativo a la asignatura.
A mi entender un auxiliar, aunque no sea docente, es un apoyo al profesor, un miniviaje a la cultura e idioma real que impartimos y creo que, bien aprovechados, podrían hacer maravillas en un aula. Sin embargo, no todos los profesores ven su utilidad y me consta que, desafortunadamente, en muchos de estos centros terminan relegados a un rincón de la clase como parte del mobiliario escolar.
En conclusión, la respuesta a la gran pregunta de por qué no sabemos hablar inglés es principalmente porque el inglés se enseña con una finalidad errónea. Y a pesar de que muchos profesores nos empeñemos en cambiar las formas, no es fácil luchar ante un currículum con leyes contradictorias, que impone reglas sin posibilidad de llevarlas a las aulas y que no evalúa la competencia comunicativa que plantea en su currículo con una prueba específica para la que el alumno se pueda preparar y pueda llevar después a la práctica, en la vida real.
Así mismo, si a esta situación de teoría inejecutable le añadimos la práctica real en clases con ratios inmensas y llenas de necesidades específicas, la enseñanza, y aquí ya no solo de un idioma, se complica aún más.
En cualquier caso, por mi parte, con la esperanza de un futuro cambio, seguiré abogando por una enseñanza del inglés comunicativa, intentado que mi alumnado no pase por 12 años de aprendizaje de un idioma sin haberlo usado y seguiré entrando en clase el primer día de curso diciendo: “hi guys!, let's have some fun!”.
Quién sabe, tal vez algún día alguno de estos estudiantes se encuentre con un extranjero que le pregunte “how are you doing, mate?” y le sepa contestar… Y yo, como docente, habré cumplido mi objetivo, aunque no sea curricular, de haberle enseñado a comunicarse en inglés.
Escrito por: Irene Alonso.
Docente y escritora
Nuestro viaje hacia la fluidez natural
Creemos firmemente en hablar inglés con todos nuestros alumnos siempre, y solo en inglés. Si bien sabemos que no es el método más fácil, estamos seguros de que es, con diferencia, la mejor manera de ayudar a nuestros estudiantes a asimilar el idioma en todos sus matices, desde el más mínimo detalle hasta las ideas más complejas.
Se incorporarán una variedad de medios y tecnologías diferentes para garantizar que su experiencia gire principalmente en torno a la vida en movimiento y, en segundo lugar, lo más importante: los cinco sentidos estarán presentes, tratándose de un espacio en el que todos los aspectos de la vida cotidiana se experimenten y desarrollen en inglés.Tú y yo aprendimos a hablar después de escuchar las voces de nuestros padres desde el momento en que pudimos hacerlo, dentro del útero de nuestra amada madre. Durante los primeros años de nuestras vidas es lo que hacemos: escuchamos, observamos y nos empapamos de todos los matices y ritmos de las voces que nos rodean en nuestras vidas. Cuando empezamos a hablar, no es en estructuras, sino como un experimento con el sonido, como vocalización de ideas, sentimientos y emociones. Por necesidad y deseo de comunicarnos con el mundo que nos rodea.
Sabemos que si vamos a emular la forma en que un niño aprende su lengua materna, tendremos que trabajar duro y superar los límites.
Somos conscientes de que si el inglés se enseña solamente en el aula (en su formato estructurado actual de listas y fichas) será muy difícil para un niño que alguna vez sea capaz u obtenga la confianza necesaria para usar el idioma en situaciones del mundo real.
En English Naturally hemos estado enseñando de una manera muy natural, comunicativa, divertida y lúdica hasta la fecha, ya que estamos convencidos de que los niños aprenden mejor cuando se divierten. Sin renunciar a estos principios básicos, en 2020 introdujimos un enfoque mucho más holístico, global e integral para presentar el idioma en la vida de nuestros estudiantes con el fin de garantizar que se les dé la oportunidad de experimentar el idioma en una serie de entornos diferentes y a través de una variedad interminable de temas y actividades.
No nos basta con seguir ofreciendo lo mismo de siempre. Se puede y se debe hacer mucho más y mucho mejor. En esto dedicamos nuestro trabajo. En asegurarnos de que estamos derribando los límites y las normas que nos mantienen estáticos, esforzándonos por la mejora constante. Estamos empujando los límites de “lo que se espera" aún más, a medida que evolucionamos de una Academia a un Centro de estilo de vida en inglés. Por supuesto, con la familia siempre en el centro de todo lo que hacemos.
El paquete de productos de English Naturally se ha elaborado cuidadosamente para garantizar que a cada uno de nuestros estudiantes se le ofrezcan las mismas increíbles experiencias y oportunidades, donde se les presente y se explore con ellos el inglés, a través de numerosas y variadas actividades, entornos y estilos. Pero no solo llegamos al estudiante, traemos con nosotros a este estilo de vida a sus familias y amigos también, construyendo una comunidad de habla inglesa. Este paquete de productos, este programa, lo hemos llamado Project Fluency.
Creemos firmemente en hablar inglés con todos nuestros alumnos siempre, y solo en inglés. Si bien sabemos que no es el método más fácil, estamos seguros de que es, con diferencia, la mejor manera de ayudar a nuestros estudiantes a asimilar el idioma en todos sus matices, desde el más mínimo detalle hasta las ideas más complejas.
Se incorporarán una variedad de medios y tecnologías diferentes para garantizar que su experiencia gire principalmente en torno a la vida en movimiento y, en segundo lugar, lo más importante: los cinco sentidos estarán presentes, tratándose de un espacio en el que todos los aspectos de la vida cotidiana se experimenten y desarrollen en inglés.
Daniel Peel
Se incorporarán una variedad de medios y tecnologías diferentes para garantizar que su experiencia gire principalmente en torno a la vida en movimiento y, en segundo lugar, lo más importante: los cinco sentidos estarán presentes, tratándose de un espacio en el que todos los aspectos de la vida cotidiana se experimenten y desarrollen en inglés.Tú y yo aprendimos a hablar después de escuchar las voces de nuestros padres desde el momento en que pudimos hacerlo, dentro del útero de nuestra amada madre. Durante los primeros años de nuestras vidas es lo que hacemos: escuchamos, observamos y nos empapamos de todos los matices y ritmos de las voces que nos rodean en nuestras vidas. Cuando empezamos a hablar, no es en estructuras, sino como un experimento con el sonido, como vocalización de ideas, sentimientos y emociones. Por necesidad y deseo de comunicarnos con el mundo que nos rodea.
Sabemos que si vamos a emular la forma en que un niño aprende su lengua materna, tendremos que trabajar duro y superar los límites.
Somos conscientes de que si el inglés se enseña solamente en el aula (en su formato estructurado actual de listas y fichas) será muy difícil para un niño que alguna vez sea capaz u obtenga la confianza necesaria para usar el idioma en situaciones del mundo real.
En English Naturally hemos estado enseñando de una manera muy natural, comunicativa, divertida y lúdica hasta la fecha, ya que estamos convencidos de que los niños aprenden mejor cuando se divierten. Sin renunciar a estos principios básicos, en 2020 introdujimos un enfoque mucho más holístico, global e integral para presentar el idioma en la vida de nuestros estudiantes con el fin de garantizar que se les dé la oportunidad de experimentar el idioma en una serie de entornos diferentes y a través de una variedad interminable de temas y actividades.
No nos basta con seguir ofreciendo lo mismo de siempre. Se puede y se debe hacer mucho más y mucho mejor. En esto dedicamos nuestro trabajo. En asegurarnos de que estamos derribando los límites y las normas que nos mantienen estáticos, esforzándonos por la mejora constante. Estamos empujando los límites de “lo que se espera" aún más, a medida que evolucionamos de una Academia a un Centro de estilo de vida en inglés. Por supuesto, con la familia siempre en el centro de todo lo que hacemos.
El paquete de productos de English Naturally se ha elaborado cuidadosamente para garantizar que a cada uno de nuestros estudiantes se le ofrezcan las mismas increíbles experiencias y oportunidades, donde se les presente y se explore con ellos el inglés, a través de numerosas y variadas actividades, entornos y estilos. Pero no solo llegamos al estudiante, traemos con nosotros a este estilo de vida a sus familias y amigos también, construyendo una comunidad de habla inglesa. Este paquete de productos, este programa, lo hemos llamado Project Fluency.
Creemos firmemente en hablar inglés con todos nuestros alumnos siempre, y solo en inglés. Si bien sabemos que no es el método más fácil, estamos seguros de que es, con diferencia, la mejor manera de ayudar a nuestros estudiantes a asimilar el idioma en todos sus matices, desde el más mínimo detalle hasta las ideas más complejas.
Se incorporarán una variedad de medios y tecnologías diferentes para garantizar que su experiencia gire principalmente en torno a la vida en movimiento y, en segundo lugar, lo más importante: los cinco sentidos estarán presentes, tratándose de un espacio en el que todos los aspectos de la vida cotidiana se experimenten y desarrollen en inglés.
Daniel Peel
“Los niños aprenden mientras juegan. Lo que es más importante, cuando juegan aprenden a aprender".